Nunca sos vos, seri­a el comercio de el anhelo (2022)

Como son las parejas contemporaneas?

Que obliga la solteria en el Siglo XXI? Por que las mujeres sufrimos mas en el amor? Partiendo sobre su destreza personal como hija de la clan judia ortodoxa que tuvo que salir al mundo sin conocer las reglas sobre la secularidad, Tamara Tenenbaum se le atreve al amor, al deseo y a las vinculos. En este adelanto sobre El fin del amor cuestiona el paradigma de la soltera orgullosa.

Pensar en las parejas contemporaneas me produce dos tipos diversos de frustraciones.

Una gran pieza sobre lo mas complicado es rebasar herencias viejas reconocer hasta que momento aun las hembras estamos gobernadas por normas que nos subordinan diplomacia, social y economicamente, y montar de los sitios en las que a veces nosotras mismas alimentamos y reforzamos esa control por motivo de que nunca tuvimos tiempo, espacio ni plata de instruirse a realizar una diferente cosa. La una diferente angustia son las nuevos problemas las que vienen de las nuevas tecnologias, de el modo en que modelos identidades se construyen cada vez mas en el comercio y no ha transpirado las maneras en que esa logica de la aspiracionalidad asi­ como el dispendio invaden cada rincon de nuestras vidas, incluso esos que nos esforzamos tanto (pensamos) por sostener externamente de la esfera de el calculo. Los dos clases de conflicto me parecen interesantes e importantes, No obstante, En Caso De Que de parejas se prostitucion, me preocupa mas lo que no ha cambiado que lo que si porque siento que es abundante menos.

Cuando el asunto seri­a la solteria, en cambio, ocurre lo contrario en las ultimos cincuenta o sesenta anos ha cambiado al completo. Casi podriamos aseverar que no Tenemos tema de contraposicion factible por motivo de que lo que actualmente llamamos solteria nunca existia hace un par de generaciones. En el Once ortodoxo aun no hallarais, y quizas no exista De ningun modo si existiera, el Once dejaria acontecer el Once. Alli, la mayoria de estas mujeres se residencia dentro de las 18 desplazandolo hacia el pelo los 22 anos en algunas familias ultraortodoxas puede suceder antes, No obstante en la legitimidad moderna argentina esta muy establecido que las chicas acaban el complementario y no ha transpirado funciona de sparky despues empiezan sus familias. La exploracion, no obstante, suele comendar en los ultimos anos de vida de colegio desde los quince o 16 bien seri­a comun comendar a notar que las chicas se planchan el cabello, se visten con ropa mas rostro asi­ como llamativa (adentro sobre los parametros del tzniut o reserva) e inclusive bajan de lastre.

Adquirir marido seri­a necesario asi­ como la compresion por obtener individuo “bueno” (un pequeno sobre una estirpe conocida, relativamente joven, sobre gran emplazamiento economica) seri­a alta porque sobre eso depende su porvenir crematistico desplazandolo hacia el pelo social. Y mas vale que sea ripido pasados los 23, 24 o 25, ya estas compitiendo con las nuevas “ingresantes” sobre 18 o 19 y no ha transpirado tus chances de conseguir un matrimonio ventajoso (o un casamiento a secas) caen de modo exponencial.

Aunque ya sea que ese periodo sobre “no matrimonio” posadolescente dure alguno, diez o cincuenta anos, dificilmente se lo pueda cotejar con la solteria seglar. Las parejas han cambiado escaso, debido a lo he citado muchas veces modelos ideas sobre fidelidad son bastante parecidas a las sobre nuestros padres, mas alla de el ruido que nos hagan o sobre que cada vez mas seres se animen a pensar pactos vinculares diversos. Lo que se modifico por entero, en velocidades, seri­a el manera en que vivimos fuera de la pareja. Las chicas nunca casadas de el Once casi siempre se quedan en las casas de las padres. Si poseen fortuna, disponen con un cuarto personal, pero lo mas frecuente podri­a ser lo compartan con las hermanas, no importa la antiguedad que tengan, No obstante lo que si se da en cualquier caso podri­a ser duermen en una cama individual. Demasiadas sobre ellas trabajan (igual que maestras o secretarias en un cuerpo sobre la comunidad o en el local de sus padres), pero jamas se les ocurriria abandonar la casa familiar y no ha transpirado, aunque aporten dinero a la clan, un poquito se las alcahueteria igual que si fueran jivenes eternas. 1

Realiza poco lei una nota de The New York Times 2 que contaba la biografia de un departamento en donde varias chicas de la legitimidad moderna, la misma sobre la que vengo yo, vivian juntas. Me parecio curioso, por motivo de que no conozco casos parecidos. Lo gracioso podri­a ser la nota se maravillaba con la vida en frecuente de las chicas y con lo diferente que es su seccion sobre cualquier otro alojamiento sobre chicas solteras, asi­ como no solo por motivo de que cocinen kosher asi­ como tengan la indicacion contra usar la computadora del living en shabat duermen juntas, dos chicas por cuarto en camas gemelas, pero todas poseen mas sobre 30 anos. A lo extenso sobre la nota la redactor evita nombrar el elefante en la habitacion no duermen juntas porque deben no se que creencias en repartir, en lo mujeril desplazandolo hacia el pelo en la vida comunitaria; duermen juntas porque nunca cogen con ninguna persona.

En el siglo XXI, para la mayoridad sobre nosotros, acontecer soltero obliga coger con demasiada publico en simultaneo o de manera sucesiva, en seguido o cada tanto. Agarrar con amistades, con amigos sobre amistades, con gente que conocimos en un bar o en la red, con ex parejas, con alguno que quizas se convierta en la futura pareja (cosa que las mas de estas veces nunca sucede), con individuos que se encuentran en otras parejas, abiertas o cerradas con cualquiera. Eso nunca siempre fue mismamente (de las chicas), ni siquiera es asi desde hace abundante desplazandolo hacia el pelo desde hace mucho menor que seri­a algo blanqueado socialmente.

En su libro Future Sex, la escritora Emily Witt empieza reflexionando en este estado sobre cosas que rara vez percibimos como la novedad historica que seri­a. Plantea que, de hecho, seri­a tan nuevo que el idioma nunca ha avanzado a su ritmo nunca hay palabras exactas de llamar a esas relaciones que poseemos cuando nunca estamos en la comunicacion. 3